El Centro de Defensa Contra el Fuego cumple 20 años en León y saca sus actividades fuera de sus instalaciones

El Centro de Defensa Contra el Fuego de León.

Elena F. Gordón / Agencia ICAL

El Centro autonómico de Defensa Contra el Fuego ubicado en León celebra su 20 aniversario y lo hace tras haber formado a más de 32.000 profesionales y contabilizar más de 60.000 asistentes -principalmente escolares- a las actividades de sensibilización y concienciación ciudadana que se desarrollan en el Aula del Fuego. Son cifras que ofreció este lunes el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez Quiñones, antes de inaugurar una Jornada Técnica de Cooperación de Incendios Forestales.

El consejero destacó también la relación con el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico y subrayó que gracias al acuerdo alcanzado en el marco del Diálogo Social el número de formadores ha pasado de seis a 18, lo que permite realizar actividades fuera de las instalaciones. También recalcó que la dotación profesional ha crecido con un equipo especializado de investigación, asistido por herramientas informáticas. “Estamos más preparados para dar una mejor respuesta”, dijo.

Suárez-Quiñones recordó que el Centro de Defensa Contra el Fuego de León está abierto a la cooperación nacional e internacional y que el operativo contra incendios de Castilla y León tiene una media de 22 intervenciones anuales fuera de Castilla y León, de las que el 60 por ciento se llevan a cabo en Portugal.

De hecho, la jornada que hoy inauguró cuenta con la participación de representantes del país luso y de comunidades autónomas como Galicia, Cantabria, Castilla-La Mancha y Extremadura con las que, señaló, se producen “colaboraciones habituales y con las que hoy celebramos esos 20 años de existencia”.

“Los extremos climáticos hacen que las predicciones de incendios sean inseguras”

Durante la apertura del acto, el consejero leonés afirmó que “los extremos climáticos de los últimos años hacen que las predicciones sean todas inseguras” respecto a cómo puede desarrollarse la próxima campaña de incendios y añadió que “no se prevén escenarios como en el año 2022”.

Las lluvias recientes, ya en plena primavera, son beneficiosas -remarcó- porque favorecen que los fuegos “que habrá, seguramente, como no puede ser de otra manera, porque vendrá el agostamiento, vendrán las altas temperaturas” avancen menos rápido.

Suárez-Quiñones apeló una vez más a la prudencia como una herramienta muy útil en la lucha contra el fuego. “Lo que hay que trasladar siempre es responsabilidad, cuidado del monte. Los incendios forestales no solo atacan al medio natural, que es suficiente, sino a las personas y producen víctimas, incluso mortales”, recalcó antes de pedir a la ciudadanía que atienda las indicaciones de los profesionales y se dé cuenta a la autoridad cuando se tenga conocimiento de cualquier actuación imprudente, intencional o dolosa de quemar el monte.

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