Las quejas obligan a la Junta a exigir en rutas escolares cinturones de seguridad y sillas de retención infantil

Imagen de archivo de un accidente de un autobús escolar en la Comunidad. / M. Martín

ICAL

El consejero de Educación, Fernando Rey, anunció hoy que la Junta incluirá entre los criterios de adjudicación de las rutas de transporte escolar de la Comunidad la obligatoriedad de contar con cinturones de seguridad de más de dos puntos y sillas de retención infantil adecuadas a la talla y el peso de los escolares.

Esta medida, según confirmó Rey en respuesta a una pregunta formulada en el pleno de las Cortes por el portavoz de IU-Equo, José Sarrión, entrará en vigor a partir del próximo curso escolar, con lo que Castilla y León se posicionará “a la vanguardia” en materia de seguridad de los escolares, dado que solo el País Vasco cuenta con una normativa en este sentido.

Rey confirmó que se actuará “con todo el agrado” dando respuesta así, no solo a la preocupación de los padres de los escolares, sino también a los requerimientos efectuados por el Procurador del Común, porque la presencia de cinturón de seguridad en todos los vehículos de transporte escolar es “insuficiente” para garantizar la seguridad de los 34.000 escolares que cada día participan en alguna de las rutas en Castilla y León.

El consejero de Educación respondió así a la pregunta efectuada por Sarrión que quiso conocer las medidas previstas por el Ejecutivo autonómico para fomentar la instalación de cinturones de seguridad regulables en altura y sistemas de retención infantil, en especial después de un incidente registrado en septiembre del año pasado en el que una escolar de tres años de la ruta Portillo-Aldea de San Miguel que llevaba el cinturón “correctamente abrochado” se quedó “colgando literalmente” como consecuencia de un frenazo del autobús, que viajaba a muy poca velocidad.

Este hecho llevó a los padres a investigar sobre los sistemas de seguridad infantil en los autobuses y a organizarse en la plataforma 'Cinco puntos'. Sarrión invocó al “principio de prevención” e instó a la Junta a buscar soluciones para este tipo de problemas, ya que alertó de que se están contraviniendo directrices, además de poniendo en peligro la seguridad de los niños. “Pedimos soluciones y que se cumpla la Ley al máximo para garantizar la seguridad de los niños en Castilla y León”, reclamó.

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