La Junta, categórica ante el peor incendio de Castilla y León, en Zamora: “Se hicieron las cosas perfectamente”

Visita institucional al puesto de mando del incendio de la Sierra de la culebra. / JL Leal / ICAL

Juanma de Saá / ICAL

La Junta de Castilla y León asegura que “se hicieron las cosas perfectamente” en la gestión de los incendios forestales registrados desde mediados del pasado mes de junio en la provincia de Zamora, especialmente en el grave de la Sierra de la Culebra, que se convirtió en el peor siniestro forestal de la Comunidad y casi de España, sin tener dispuesto todo el operativo antiincendios por ser antes del mes de julio, que es cuando se activa.

Esa reflexión y ese convencimiento lo ha expresado este miércoles el director general de Patrimonio Natural y Política Forestal de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta, José Ángel Arranz. La mano derecha del consejero responsable de este área, el leonés Juan Carlos Suárez-Quiñones, aseguró que todavía, a pesar de lo que sucedido este verano, a mucha gente le cuesta entender lo que está pasando con los incendios forestales, que son muy complejos y difíciles de apagar. La sequía acumulada no se le escapa a nadie. Tuvimos un incendio con más de once focos, vientos de más de 70 kilómetros por hora, incendios que quemaron más de 1.300 hectáreas a la hora, con una virulencia nunca vista“, expuso.

“El operativo que consiguió que los daños se minimizaran a lo que fue, que fue mucho y que podría haber sido mucho más sin una actuación eficaz como la que tuvo el operativo. Es la opinión de casi todos los profesionales. Otra cosa son las opiniones de otro tipo de reclamaciones, ligadas a condiciones laborales, que nada tienen que ver con la eficiencia a la hora de extinguir estos incendios”, añadió.

José Ángel Arranz hizo estas declaraciones en la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, antes de mantener una reunión con los alcaldes de los municipios afectados por el incendio de la Sierra de la Culebra declarado el pasado 15 de junio y que calcinó 25.000 hectáreas.

“Esto es algo que sucede en toda Europa. Los incendios han sido excepcionales en Francia, Italia y Grecia. En España ha habido incendios excepcionales. ¿Qué pasa en Castilla y León? Que tenemos unas masas forestales más continuas y más grandes. Tenemos más monte, más vegetación y con menos discontinuidades y eso complica la extinción de nuestros incendios frente a comunidades con menos masa forestal”, aseguró.

“Hubo un incendio de 10.000 hectáreas en Aragón y, en Galicia, muchos incendios por encima de la media, en una comunidad húmeda. Lo que sucede en Castilla y León lo vemos más cerca pero, si levantamos la cabeza, está sucediendo en toda Europa y en el continente americano. Con la sequía y con las olas de calor más fuertes de la historia. Estamos superando récords. Además, en Castilla y León ha habido más tormentas secas”, apuntó.

En este contexto, Arranz Sanz recordó que el operativo de Castilla y León “lleva apagados este año más de 700 incendios” y que, en la última semana “se apagaron más de 300 incendios, con mucha eficacia, muchos de ellos, sin pasar de conatos” e insistió: “El problema es cuando adquieren ese comportamiento bajo condiciones muy especiales. Entiendo que es difícil asimilar lo que está sucediendo para quien no conozca esto. Hemos tenido la mala suerte de los fuertes vientos en Zamora, donde los incendios quedaron por encima de la capacidad de extinción de este y de cualquier otro operativo y hubo que esperar las ventanas de oportunidad para apagarlos”.

Igualmente, afirmó que el problema de los montes es “bastante general” en Europa y que va ligado a los aprovechamientos ganaderos y agrarios. “Cada vez hay más zonas abandonadas y muchos profesionales incidimos en que hay que actuar sobre la biomasa. En nuestra parte de gestión directa en los montes de utilidad pública y que se mantenga la actividad agraria y que haya menos biomasa en los montes”, concluyó.

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