Pablo Iglesias 'encumbra' a dos leoneses a su nueva dirección tras la mayor remodelación de Podemos

Los leoneses Pablo Fernández y Ana Marcello forman parte del nuevo Consejo de Coordinación nacional de Podemos. / Peio García / ICAL

León gana peso especifico en la dirección nacional de Podemos que lidera Pablo Iglesias. El partido ha aprobado este sábado nuevas incorporaciones al denominado Consejo de Coordinación nacional en una maniobra que supone la mayor recomposición de este órgano sin haberse producido como consecuencia de un congreso o asamblea ciudadana. Y dos nombres leoneses, uno nuevo y otro que se mantiene, aparecen en el nuevo organigrama.

Por un lado, la exdiputada nacional Ana Marcello, que no consiguió revalidar su acta en las elecciones generales de abril de este año, ha sido nombrada para responsabilizarse de la secretaría de Participación, un puesto que hasta ahora ocupaba Noelia Vera. Es la primera vez que Marcello, siempre de confianza de Iglesias, aparece en este puesto de dirección nacional. Su labor será la participación activa de los círculos en los que se organiza Podemos desde su creación.

Y por otro lado, el también leonés Pablo Fernández continúa en este órgano, ahora al frente de la secretaría de Mundo Rural. Fernández sigue siendo el coordinador autonómico, y de hecho fue el candidato a la Junta de Castilla y León el pasado 26-M, obteniendo in extremis un acta como procurador en las Cortes autonómicas por el recuento de un puñado de votos, arrebatándoselo a Ciudadanos, a quien se le había otorgado en la noche electoral.

En clave nacional, hoy se ha confirmado que Pablo Echenique será relegado de la secretaría de Organización, en detrimento del diputado canario Alberto Rodríguez, dentro de las principales novedades emanadas hoy de la celebración del Consejo Ciudadano Estatal. En total, casi un tercio de la nueva ejecutiva contará con caras nuevas, mientras que alrededor de otro tercio renuevan funciones. Los cambios han sido ratificados por 42 votos a favor, seis abstenciones y ninguno en contra.

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, expuso este sábado en el Consejo Ciudadano Estatal de su partido que “el papel de los liderazgos jugó un rol muy importante” en la diferencia entre el resultado que obtuvo la formación en las elecciones generales de abril y las autonómicas, municipales y europeas de mayo.

Así lo hizo en la intervención de 20 minutos que protagonizó ante el máximo órgano de Podemos entre asambleas estatales, el equivalente al Comité Federal del PSOE, y que comenzó hacia las 11.15 horas, con un retraso de 45 minutos sobre lo previsto, debido a que antes Iglesias y el hasta ahora secretario de Organización y desde hoy de Acción de Gobierno, Pablo Echenique, tuvieron una reunión con los líderes autonómicos de Podemos en la Comunidad Valenciana, Baleares, Canarias y La Rioja, que pueden entrar en los gobiernos regionales del PSOE.

En la parte de su discurso dedicada a la clave interna y no a las negociaciones con el PSOE, Iglesias no hizo ninguna referencia a los nombramientos que el Consejo aprobará hoy: el de Echenique para Acción de Gobierno y su sustitución por el diputdo tinerfeño Alberto Rodríguez en Organización.

Resultados “decepcionantes”

Sí la hizo a los resultados de las elecciones europeas, autonómicas y municipales del 26 de mayo. Los calificó de “muy malos y muy decepcionantes”, y resaltó que “llama la atención que se produjeran sólo un mes después de las generales, donde obtuvimos un resultado muy por encima de lo que cabía esperar”.

Iglesias atestiguó que “no es una novedad en Podemos”, donde “salvo excepciones muy específicas” como el del propio Echenique en las autonómicas de Aragón en 2015 o los de Ada Colau y José María González, 'Kichi', en las municipales de entonces y de mayo, los resultados son “mucho peores que en las generales”.

Curiosamente, en el día del relevo de Echenique por Rodríguez, Iglesias no se refirió, quizá porque la dio por hecha, a la escasa implantación territorial de Podemos a la que ha apelado en varias ocasiones desde el 26 de mayo. En su lugar, interpretó que “el papel de los liderazgos jugó un rol muy importante”, y de ahí el éxito “espectacular” de Colau y 'Kichi'.

Por unas cosas o por otras, Iglesias reconoció las “dificultades para convertirnos en un referente territorial”, pero se mostró indulgente al constatar que el partido sólo tiene cinco años de vida, que en 2015 no se presentó con su marca propia a las municipales y, con cierto humor autocrítico, advirtió: “Somos especialistas en tener un nombre diferente en cada territorio”. En este sentido, bromeó que, en la campaña de las municipales, a cada sitio donde acudía a dar un mitin tenía que “preguntar cómo nos llamamos aquí”.

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